Louis Vuitton Trainer

La verdad lo compré porque vi que era un lote súper limitado y me dio miedo quedarme sin la oportunidad. Decían que el precio estaba así por un error en la importación, y como solo habían 40 pares disponibles, decidí arriesgarme. Menos mal lo hice. Los tenis llegaron rápido y la calidad me dejó sin palabras. Se nota que es un producto de lujo desde que abres la caja. El diseño, los acabados, el material, todo grita exclusividad. Son elegantes, llaman la atención en su justa medida y tienen ese peso de algo bien hecho, sin parecer exagerado. Desde que los uso, ya he recibido varios cumplidos y más de uno me ha preguntado dónde los conseguí. Sin exagerar, ha sido una de las mejores compras que he hecho en mucho tiempo.

Nunca pensé que un par de tenis pudiera hacer tanta diferencia. Cuando vi la oferta, dudé un poco, pero en cuanto me puse los Louis Vuitton, todo tuvo sentido. Los tenis imponen presencia. Empecé a usarlos en reuniones y encuentros de trabajo, y el ambiente cambió. La gente empezó a mirarme con más respeto, más confianza. Coincidencia o no, cerré dos negocios importantes esa misma semana. Sin duda, fue una de las mejores decisiones que he tomado.

Siempre quise tener unos tenis así, pero nunca me lo había permitido. Esta vez sentí que era el momento. Vi que era una oportunidad única, con pocas unidades disponibles y un precio que normalmente no se ve... y me los regalé. Más que unos tenis, para mí representan todo lo que he trabajado para estar donde estoy. Cada vez que los uso, me acuerdo de eso. No sé si todos lo notan, pero yo sí lo siento: es como llevar un pedazo de logro en los pies. Y sí, se ven increíbles.